Actualmente se escucha en muchas conversaciones, que tienen por objeto el mantenimiento o mejoramiento de la salud, la utilidad de las semillas de la planta Chía como complemento a una alimentación sana y la realización de ejercicios físicos.

¿Qué es la Chía?

Esa planta aromática, también conocida como Salvia hispánica L. en el mundo de la biología, es originaria de la región mesoamericana, proliferando principalmente en las regiones montañosas de Guatemala, Salvador y México, pero también ha logrado ser plantada en el norte de Argentina, como resultado de una iniciativa comercial de explotación del producto.

En lengua maya, Chía es el equivalente del castellano “fuerza”, quedando en evidencia la importancia que le atribuían las comunidades autóctonas de esas latitudes, a los aportes de nutrientes de la semilla de la planta, como forma de fomentar la generación de fortaleza física. Éstos utilizaban la semilla como alimento habitual en su dieta, junto con el maíz, los frijoles y el amaranto.

Aspectos nutricionales

La semilla de la planta contiene, para una porción de 100 grs., un aproximado de 40 grs de fibras dietéticas, 14 gramos de proteínas, 5 gramos de hidratos de carbono y 32 grs. De grasa y un porcentaje de alrededor de 9 grs. de otros nutrientes.

También cuenta con una importante cantidad de vitaminas del complejo B, lo cual, junto con el alto contenido de proteínas, podría aportar los requerimientos nutricionales requeridos, en el marco de un tipo de alimentación que no cuente con presencia de proteínas de origen animal, tal como los regímenes vegetarianos y veganos.

Otro aspecto resaltante, entre los elementos que aporta la semilla, se encuentran los ácidos alfa-linoléico, eicosapentaenoico y docosahexaenoico, que conforman el grupo Omega-3.

El consumo de su semilla, puede realizarse de diversas maneras, entre las cuales se encuentran, añadirla espolvoreada sobre los alimentos, mezclarla con zumos, yogures o incluso agua, comerlas solas, o inclusive, utilizarla como ingrediente en la preparación de cualquier plato o postre. Esta semilla no cambia significativamente el sabor de las comidas y bebidas, por lo cual es ideal para combinarlas con cualquiera de ellas.

Beneficios para la salud

En cuanto a los beneficios para la salud que reporta esta planta, mediante la ingesta de sus semillas tenemos, en primer lugar, que permiten mantener el cuerpo hidratado, debido a que las mismas tienen una gran capacidad para retener el agua.

En segundo lugar, cabe resaltar, su gran concentración de antioxidantes, por lo cual resulta un excelente aliado en la lucha contra el envejecimiento prematuro.

Por otra parte, debido a su alto contenido de los ácidos grasos polinsaturados Omega-3, mantiene los tiempos de coagulación sanguínea en sus valores óptimos, mejorando las condiciones de circulación de sangre y disminuyendo la incidencia de eventos cardiovasculares negativos. También regula los niveles de grasa y colesterol sérico. Para mejorar el aprovechamiento de las bondades de esos aceites, se aconseja triturar o morder las semillas.

Adicionalmente, cuenta con propiedades anti-inflamatorias, lo cual permite aliviar dolores en articulaciones.

Por último, para las personas que se preocupan por la incidencia del exceso de peso corporal en diversos problemas de salud, tenemos la excelente noticia, de que esta semilla ayuda a bajar de peso, al actuar directamente contra los niveles de grasas acumuladas en el organismo. Por otra parte, también afecta el apetito, debido a la gran cantidad de fibra que contiene; permitiendo saciarnos con porciones alimenticias más pequeñas.

Cuando se consuma este alimento, debe evitarse el exceso, pues se han llegado a reportar efectos no deseados, entre los que se encuentran la distensión abdominal por exceso de gases, estreñimiento, problemas con los niveles de azúcar en sangre, presión arterial baja, y en muy raras ocasiones, desarrollo de alergias a estas semillas. Sin embargo, muchos de estos problemas pueden evitarse ingiriendo cantidades adecuadas del producto. De todos modos, se sugiere consultar al médico antes de iniciar su consumo, para evitar padecer, los poco comunes, pero existentes efectos secundarios del consumo de las semillas de esta planta.

Por Miguel

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